El conjunto de liniers le ganó ayer 2 a 0 a Chivas de Guadalajára por la vuelta de los octavos de final de la Copa Santander Libertadores, pero no le alcanzó para meterse en la próxima ronda, tras haber perdido en la ida por 3 a 0. Con este traspie se quedó afuera de todo, ya hacia varias fechas no peleaba por el torneo local, y ahora le dice adios a su única esperanza que era la copa.
A Vélez le faltó sólo un gol para llevar la serie a los penales, pero eso no pudo ser a pesar de que estuvo muy cerca. La propuesta fue muy clara: el local salió a atacar a los mexicanos desde el arranque del partido, y el visitante a defender esos tres goles conseguidos en casa.
Todo parecía creer que la hazaña se estaba por venir, cuando ni bien arrancado el encuentro, a los cuatro minutos, el uruguayo Santiago Silva logró desviar un centro desde la izquierda que terminara en gol. A partir del tanto, el Fortín fue al ataque con mucha anvisión y con ganas de llevarse por encima al rival, mientras que el visitante sólo se dedicaba a demorar el tiempo lo mayor posible y practicamente se sostuvo en las manos de su arquero Liberio Sánchez, quien tuvo una noche espectacular.
En el segundo tiempo, el tiempo seguía pasando y Vélez no podía encontrar los goles de la clasificación. Ricardo Gareca, perdido por perdido, decidió quemar todas sus cartas y mandó a la cancha a Ricardo Álvarez, Juan Manuel Martinez y Rolando Zárate, pero a este equipo le faltó suerte y puntería necesarias para revertir la situación, y gracias a su búsqueda encontró a los 43 minutos un tanto de Roly Zárate que le daba esperanza. Siguió intentando hasta el final del partido pero el silbáto final llegó y los de Liniers se quedaron sin el sueño de lograr la Copa Libertadores.
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